Los contenedores de atmósfera controlada están diseñados para retardar la maduración de los productos climatéricos mediante el control preciso de la composición de la atmósfera interna. Los parámetros ajustables incluyen temperatura, humedad, niveles de oxígeno, dióxido de carbono y etileno, lo que permite un manejo óptimo de la conservación de los productos durante su almacenamiento.